lunes, mayo 9

Relato y cortometraje: "Continuidad de los parques" Julio Cortázar


      Los libros que lees nunca pueden dejar de sorprenderte y transmitirte todas las sensaciones posibles. A veces sus historias, te pueden atrapar con sus hilos finos, y ese mundo que penetras por la tinta de sus letras te puede llevar al lugar que menos te puedes imaginar. El escritor de ascendencia argentina, aunque nacido en Bélgica, Julio Cortázar es uno de los mejores exponentes de la literatura imaginativa y admirada por su inagotable creatividad. Un homenaje al autor, su obra y dos cortometrajes.


  •  Texto:  Aquí tienes uno de sus cuentos breves más conocidos y comentados. Tienes la posibilidad de escucharlo con la propia voz de Cortázar:

                                           Continuidad de los parques





       "Había empezado a leer la novela unos días antes. La abandonó por negocios urgentes, volvió a abrirla cuando regresaba en tren a la finca; se dejaba interesar lentamente por la trama, por el dibujo de los personajes. Esa tarde, después de escribir una carta a su apoderado y discutir con el mayordomo una cuestión de aparcerías volvió al libro en la tranquilidad del estudio que miraba hacia el parque de los robles. Arrellanado en su sillón favorito, de espaldas a la puerta que lo hubiera molestado como una irritante posibilidad de intrusiones, dejó que su mano izquierda acariciara una y otra vez el terciopelo verde y se puso a leer los últimos capítulos. Su memoria retenía sin esfuerzo los nombres y las imágenes de los protagonistas; la ilusión novelesca lo ganó casi en seguida. Gozaba del placer casi perverso de irse desgajando línea a línea de lo que lo rodeaba, y sentir a la vez que su cabeza descansaba cómodamente en el terciopelo del alto respaldo, que los cigarrillos seguían al alcance de la mano, que más allá de los ventanales danzaba el aire del atardecer bajo los robles. Palabra a palabra, absorbido por la sórdida disyuntiva de los héroes, dejándose ir hacia las imágenes que se concertaban y adquirían color y movimiento, fue testigo del último encuentro en la cabaña del monte. Primero entraba la mujer, recelosa; ahora llegaba el amante, lastimada la cara por el chicotazo de una rama. Admirablemente restañaba ella la sangre con sus besos, pero él rechazaba las caricias, no había venido para repetir las ceremonias de una pasión secreta, protegida por un mundo de hojas secas y senderos furtivos. El puñal se entibiaba contra su pecho, y debajo latía la libertad agazapada. Un diálogo anhelante corría por las páginas como un arroyo de serpientes, y se sentía que todo estaba decidido desde siempre. Hasta esas caricias que enredaban el cuerpo del amante como queriendo retenerlo y disuadirlo, dibujaban abominablemente la figura de otro cuerpo que era necesario destruir. Nada había sido olvidado: coartadas, azares, posibles errores. A partir de esa hora cada instante tenía su empleo minuciosamente atribuido. El doble repaso despiadado se interrumpía apenas para que una mano acariciara una mejilla. Empezaba a anochecer.



   Sin mirarse ya, atados rígidamente a la tarea que los esperaba, se separaron en la puerta de la cabaña. Ella debía seguir por la senda que iba al norte. Desde la senda opuesta él se volvió un instante para verla correr con el pelo suelto. Corrió una vez, parapetándose en los árboles y los setos, hasta distinguir en la bruma malva del crepúsculo la alameda que llevaba a la casa. Los perros no debían ladrar, y no ladraron. El mayordomo no estaría a esa hora, y no estaba. Subió los tres peldaños del porche y entró. Desde la sangre galopando en sus oídos le llegaban las palabras de la mujer: primero una sala azul, después una galería, una escalera alfombrada. En lo alto, dos puertas. Nadie en la primera habitación, nadie en la segunda. La puerta del salón, y entonces el puñal en la mano, la luz de los ventanales, el alto respaldo de un sillón de terciopelo verde, la cabeza del hombre en el sillón leyendo una novela."



                                                       Del libro Final de Juego, 1956.

  •         Cortometrajes:   Me gusta poder visualizar cualquier historia con todas sus posibilidades creativas y esta, sin duda, ofrece unas posibilidades increíbles:
    •  Un primer cortometraje: lo realizamos hace algún tiempo un grupo de amigos con más entusiasmo que profesionalidad (por ello ruego no seáis muy críticos, y que se entiendan los muchísimos errores)

      • Aquí tienes el story board o guion gráfico, del anterior cortometraje, que es una buena manera de asomarse a la elaboración de un proyecto fílmico si lo quieres ver completo, pincha en:
                            
                       



    • Segundo cortometraje: ahora la posibilidad de visualizar esta historia con otro tipo de imágenes, un excelente cortometraje con dibujos animados:
                                                







2 comentarios:

  1. Buena, con la música de suspenso y terror. Cuando ves la película luego de haberte deleitado de la lectura. Fabuloso corto animado. Saludos desde Lima.

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  2. Felicitaciones me encantó el corto animado , muy bien hecha la música de suspenso y terror. Cuando te deleitas con la lectura del cuento y luego pasas a disfrutar lo leido en la película, es lo máximo. Es doble felicidad. Aplausos!!!

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