martes, noviembre 19

Federico García Lorca: canciones de poemas


         Esta recopilación es absolutamente personal y no trata de ser rigurosa, simplemente recoger algunas de las mejores adaptaciones, según mi criterio, que seguramente no es de los más autorizados.
       
        Además es un homenaje que se aleja de esos actos adustos y académicos, llenos de encorbatados, que seguramente lo más cerca de la obra de Lorca será la portada de un libro que no habrán abierto jamás. En fin, disfrutad con las palabras y la música, que no quiero alargarme:
                                 Lorca: 75 aniversario de su muerte:

  • Ana Belén:   1998 es el año del centenario de nacimiento del poeta Federico García Lorca y Ana quiso conmemorarlo publicando dos discos bajo el título de Lorquiana en los que se recogen los poemas y las canciones populares del poeta granadino versionadas por Ana Belén y su equipo musical propio en conjunción con Chano Domínguez y sus músicos. Será creo un gran descubrimiento, para quien no lo conozca. Aquí tienes una bellísima adaptación, con música de Joan Manuel Serrat,  del poema: 
                                      "Herido de amor"


Amor, amor que está herido 

amor, amor que está herido 

herido de amor huido 
herido, muerto de amor 
Decid a todos que ha sido 
decid a todos que ha sido, 
el ruiseñor 
herido, muerto de amor 
herido, muerto de amor 
Bisturí de cuatro filos 
bisturí de cuatro filos 
garganta rota y olvido 
cógeme la mano amor 
que vengo muy mal herido. 
Que vengo muy mal herido 
herido de amor huido 
herido, muerto de amor 
herido, muerto de amor 
Que vengo muy mal herido 
que vengo muy mal herido 
herido de amor huido 
herido, muerto de amor 
herido, muerto de amor 
Muerto de amor
  • Leonard Cohen: en 1988, con su característica voz ronca que parece provenir de una gruta de la Tierra, con la canción "Take this Walz,", de su álbum I'm your man hizo una adaptación del poema:
                                                    "Pequeño vals vienés" 
    (La canción ha sido interpretada posteriormente por el ya fallecido, Enrique Morente y Lagartija Nick, en su álbum Omega (1996), y por la misma Ana Belén en su álbum Lorquiana (1998), igual que el poema de arriba.)


En Viena hay diez muchachas,

un hombro donde solloza la muerte

y un bosque de palomas disecadas.
Hay un fragmento de la mañana
en el museo de la escarcha.
Hay un salón con mil ventanas.

¡Ay, ay, ay, ay!

Toma este vals con la boca cerrada.

Este vals, este vals, este vals, este vals,

de sí, de muerte y de coñac

que moja su cola en el mar.

Te quiero, te quiero, te quiero,

con la butaca y el libro muerto,

por el melancólico pasillo,
en el oscuro desván del lirio,
en nuestra cama de la luna
y en la danza que sueña la tortuga.

¡Ay, ay, ay, ay!

Toma este vals de quebrada cintura.

En Viena hay cuatro espejos

donde juegan tu boca y los ecos.

Hay una muerte para piano
que pinta de azul a los muchachos.
Hay mendigos por los tejados,
hay frescas guirnaldas de llanto.

¡Ay, ay, ay, ay!

Toma este vals que se muere en mis brazos.

Porque te quiero, te quiero, amor mío,

en el desván donde juegan los niños,

soñando viejas luces de Hungría
por los rumores de la tarde tibia,
viendo ovejas y lirios de nieve
por el silencio oscuro de tu frente.

¡Ay, ay, ay, ay!

Toma este vals, este vals del "Te quiero siempre".

En Viena bailaré contigo

con un disfraz que tenga

cabeza de río.
¡Mira qué orillas tengo de jacintos!
Dejaré mi boca entre tus piernas,
mi alma en fotografías y azucenas,
y en las ondas oscuras de tu andar
quiero, amor mío, amor mío, dejar,
violín y sepulcro, las cintas del vals.
  • Camarón de la isla:  en su álbum de 1979, La leyenda del tiempo, el décimo álbum del cantaor andaluz . Considerado una de las obras más importantes en la historia del flamenco y, creedme, no es una exageración, supone una auténtica revolución al incluir sonoridades propias del mundo del jazz y el rock. En él hay varias adaptaciones de poemas de Federico García Lorca con música de Alameda, que fueron coproductores del álbum, además de Ricardo Pachón, Kiko Veneno y los hermanos Rafael y Raimundo Amador. A partir de este momento comienza su colaboración con el guitarrista Tomatito y se desvincula por un tiempo de Paco de Lucía. Traigo aquí una de mis preferidas, incluida en su obra teatral Bodas de sangre de 1931 y representada en 1933, la del poema:
                                                            "Nana del caballo grande" 


















Nana niño nana,
del caballo grande
que no quiso el agua,
que no quiso el agua
el agua era negra
dentro de la rama
cuando llega al puente
se detiene y canta
quién dirá a mi niño
lo que tiene el agua
con su larga cola
con su verde sal
duérmete clavel
que el caballo
no quiere beber
duérmete rosa
que el caballo
se pone a llorar.

  • ManzanitaEn 1978,​  grabó su primer disco en solitario, Poco ruido y mucho duende, con un estilo muy personal con matices flamencos. Alcanzó un enorme éxito el tema, adaptación de un poema de Lorca. Pertenece a la primera época del poeta,  cuando Federico García Lorca vive, según sus palabras, «una de las crisis más hondas de mi vida», a pesar de que sus obras Canciones y Primer romancero gitano, publicados en 1927 y 1928 respectivamente, están gozando de gran éxito crítico y popular, de este último libro:                       "Verde que te quiero Verde"
Verde que te quiero verde.
Verde viento. Verdes ramas.

El barco sobre la mar

y el caballo en la montaña.

Con la sombra en la cintura

ella sueña en su baranda,

verde carne, pelo verde,

con ojos de fría plata.

Verde que te quiero verde.

Bajo la luna gitana,
las cosas la están mirando
y ella no puede mirarlas.
Verde que te quiero verde.

Grandes estrellas de escarcha,

vienen con el pez de sombra

que abre el camino del alba.

La higuera frota su viento

con la lija de sus ramas,

y el monte, gato garduño,

eriza sus pitas agrias.

¿Pero quién vendrá? ¿Y por dónde?

Ella sigue en su baranda,
verde carne, pelo verde,
soñando en la mar amarga.
–Compadre, quiero cambiar

mi caballo por su casa,

mi montura por su espejo,

mi cuchillo por su manta.

Compadre, vengo sangrando,

desde los puertos de Cabra.

–Si yo pudiera, mocito,

este trato se cerraba.

Pero yo ya no soy yo,

ni mi casa es ya mi casa.
–Compadre, quiero morir,
decentemente en mi cama.
De acero, si puede ser,
con las sábanas de holanda.
¿No ves la herida que tengo
desde el pecho a la garganta?
–Trescientas rosas morenas
lleva tu pechera blanca.
Tu sangre rezuma y huele
alrededor de tu faja.
Pero yo ya no soy yo,
ni mi casa es ya mi casa.
–Dejadme subir al menos
hasta las altas barandas,
¡dejadme subir!, dejadme
hasta las verdes barandas.
Barandales de la luna
por donde retumba el agua.
Ya suben los dos compadres

hacia las altas barandas.

Dejando un rastro de sangre.

Dejando un rastro de lágrimas.

Temblaban en los tejados

farolillos de hojalata.

Mil panderos de cristal

herían la madrugada.
Verde que te quiero verde,

verde viento, verdes ramas.

Los dos compadres subieron.

El largo viento dejaba

en la boca un raro gusto

de hiel, de menta y de albahaca.

–¡Compadre! ¿Dónde está, dime?

¿Dónde está tu niña amarga?

¡Cuántas veces te esperó!

¡Cuántas veces te esperara,
cara fresca, negro pelo,
en esta verde baranda!
Sobre el rostro del aljibe

se mecía la gitana.

Verde carne, pelo verde,

con ojos de fría plata.

Un carámbano de luna

la sostiene sobre el agua.

La noche se puso íntima

como una pequeña plaza.

Guardias civiles borrachos

en la puerta golpeaban.
Verde que te quiero verde,
verde viento, verdes ramas.
El barco sobre la mar.
Y el caballo en la montaña.


  • Amancio Prada Los Sonetos del amor oscuro, o simplemente Sonetos, son una colección de sonetos  que escribió poco antes de ser asesinado en 1936 a los 38 años. Los versos muestran a un escritor enamorado. “Una pasión incontenible y al mismo tiempo contenida en un modelo tan estricto de arquitectura poética”, dice Amancio Prada y que para él son “sonetos de amor a secas” En 1985 compuso las melodías para los once sonetos, y fueron estrenados un año después en el Teatro María Guerrero bajo la dirección de Lluis Pasqual y grabados en estudio para un disco que editó Ariola.
"El poeta pregunta a su amor por la
 «Ciudad Encantada» de Cuenca"
  

  ¿Te gustó la ciudad que gota a gota  
labró el agua en el centro de los pinos? 
¿Viste sueños y rostros y caminos
y muros de dolor que el aire azota?



¿Viste la grieta azul de luna rota
que el Júcar moja de cristal y trinos?
¿Han besado tus dedos los espinos
que coronan de amor piedra remota?



¿Te acordaste de mí cuando subías
al silencio que sufre la serpiente,
prisonera de grillos y de umbrías?



¿No viste por el aire transparante
una dalia de penas y alegrías
que te mandó mi corazón caliente?          






3 comentarios:

  1. Una pequeña y hermosa joya que a mí,al igual que a ti,me produce el mayor de los deleites.Espero llevarte algún día al puente donde el agua se detiene y canta,en esa espléndida Vega de Granada.

    Paco Sierra.

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  2. Granada, Lorca, Camarón una mezcla tan cercana y tan fácil de disfrutar y !qué lejana para muchos!
    Saludos Paco.

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  3. Grande Camarón!!
    La verdad es que no había escuchado éste poema de Lorca versionado en canción por Camarón.
    Lo cierto es que me ha gustado sabiendo lo difícil que es versionar un poema pues aún tiene más mérito hacerlo.
    Un saludo!

    Damián Casas García

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